viernes, 23 de marzo de 2012

El famoso (y odiado) "Tienes que" ...


No es difícil descubrir este asombroso fenómeno.
Se da desde el minuto uno en el que alguien sabe que una mujer está embarazada. Desde ese momento, todo aquel que se cruce con ella, tiene algún consejo que hay que seguir sí o sí.


Desde tu suegra hasta el quiosquero, pasando por tu vecina del quinto,tu madre, la panadera (o panadero), alguien que se sienta en el autobús junto a tí ( si tienes la suerte de que te cedan el sitio... ejem)... todos ellos tienen la verdad universal ( y no tú) y TIENES QUE seguirla, of course.
El efecto tienes que, en mi caso llegó al punto de que una monja ( una moja!!! ) me dijo que tenía que llevar el embarazo con calma y rectitud y así no vomitaría...
- Mire, hermana, con todos mis respetos, si vomito 30 veces al día no es por no llevar mi embarazo con rectitud y calma, se lo aseguro.


En otra ocasión cuando ya había nacido mi bebé, una persona que no tiene hijos ( los que yo llamo "aquellos que no tienen hijos pero tienen sobrinos" ) me dijo  que lo que tenía que hacer era organizarme para poder ir a la peluquería…
- Mire señora, cuando tenga un bebé de veinte días, que no deja de llorar ni de día ni de noche, que come cada dos horas y que ha estado varias veces ingresado (era alérgico a la leche), entonces y sólo entonces querida, me dará usted lecciones para poder hacerme la manicura, la pedicura y todas las peripecias estéticas que se le ocurran.
Mención especial se merecen aquellas que yo llamo de  “la liga de las super-madres”, que son capaces de dormir 5 horas en tres veces, ir siempre  peinadas (con cepillo y secador, incluso) , la raya del ojo milimétricamente perfecta y unos tacones más altos que un vaso de tubo.
Si alguna de ellas me lee, estoy abierta a que me ayuden!!
"Este niño tiene frío, te lo digo yo", "este niño tiene hambre, te lo digo yo", "este niño necesita dormir, te lo digo yo"…
- Pero vamos a ver, por muy inútil que yo sea (que no digo que no), quién se pasa con el 25 horas al día? yo, verdad?  Digo yo que algo le conoceré…


El efecto tienes que está íntimamente relacionado con el efecto “ Dale” : consistente en dar al niño todo aquello que se te pase por la cabeza de manera urgente para observar qué reacción tiene el pequeño…  “ dale miel, dale anís, moja el chupete en nosédónde” ;  pero qué manía con dar a un bebé cosas extrañas!
Por más que intento explicar de manera educada  (bueno, si, las primeras veces es de manera muy educada), que esas cosas ya no se hacen, me miran como diciendo “Bueno, ya está la blandita que no tiene ni idea”
Frases como: “Pues yo he criado dos hijos y no me ha ido tan mal” o  “es que ahora los médicos dicen muchas tonterías, en mi época sí que se hacía bien”; van a sucederse una detrás de otra.
Mi humilde consejo de hoy, es que cuando te estén sobrepasando algunos comentarios ( que lo harán), si no quieres acabar tirandote de los pelos, y teniendo mas encontronazos de los que son sanos; lo que tienes que (jeje) hacer es poner cara de "cuanta razón tienes, cuantísimo tengo que aprender de tí" y automáticamente hacer lo que se te ponga en lo alto de la peineta!
Nos vemos la semana que  viene!!

jueves, 15 de marzo de 2012

Mi primera vez

Quería presentarme: soy madre.

Así, sin más. Soy madre a tiempo completo.
Quizá parece un poco extraña esta forma de conocernos, pero aquellos que hayan sido padres recientemente sabrán a qué me estoy refiriendo...

Dediqué desde el minuto uno de mi embarazo a prepararme a conciencia para este momento: leí más de 30 libros ( que ya os iré recomendando), más de 300 revistas, "entrevisté" a todo aquel que quisiera aconsejarme ( un buen tema a tratar, me lo apunto), fui a charlas, grupos de mamás... un sinfín de peripecias pre-bebé. Y hoy, ya con mi bebé me doy cuenta de que probablemente seguía sin saber del todo a qué me enfrentaba.

Por eso creo este Blog, para todos aquellos y aquellas que quieran saber todo lo que ronda al mundo del bebé. Pero nadie les cuenta.

Me doy cuenta de que me perdía en información semi-médica y muy técnica.En todas partes me decían lo maravilloso que era tener un hijo, pero nadie me dijo que también tiene algunos detalles (más que insignificantes) para los que es muy conveniente estar preparada, muy preparada.

En todas mis fuentes, y en mi propia cabeza; me imaginaba a mí misma y a mi maravilloso
 (y silencioso) bebé, en una playa paradisiaca, ambos descansados y disfrutantes ( Já! Qué ingenua es la ignorancia), es decir: más o menos de esta guisa:


Pero si la percepción que tienes de tí misma y de tu maravilloso (y no tan siencioso) bébe y se parece más a esta otra:


Entonces, vamos a entendernos bien.


Comenzamos!!